viernes, noviembre 21, 2008

CUANDO LAS AGUILAS SE ATREVEN.

Deseábase olvidar una derrota aplastante considerándola sólo en sus consecuencias históricas. Pero se olvidaba que la historia, si bien se comprende retrospectivamente y por grandes conjuntos de hechos, se vive y se hace día tras día.
Jean Paul Sartre.

Buen momento este para recordar, a aquellos que creen que la historia se hace con acciones inmediatas que estremecen el mundo, que las acciones históricas adquieren significado y perviven cuando se sostienen en el tiempo. Que no son los hombres, sino los procesos, los que imponen sus huellas en el libro de la historia, con tinta de sangre, de fuerza, de sudor y, por qué no, también de lágrimas. Llora el hombre histórico cuando sufre pero no se acobarda, cuando siente el traspié pero continua, cuando se impone sobre la barbaridad e impone su marcha en el devenir de los tiempos.
Es esta la lección que los tiempos antiguos nos imponen en la situación presente: una familia asediada, una empresa proscrita, todo un proyecto colectivo cuasi aplastado, pero los hombres marchando alegres contra la tempestad. La familia, la comunidad DMG imponiéndole su ritmo a la historia, en vez de ser amilanada por unos cuantos represores de ésta. Cuando el Estado impone su sello a la sociedad, es cuando nosotros, los hombres del futuro, decidimos cambiar el estilo y la estructura de la sociedad, cuando decimos que sus viejos moldes son anticuados para nuestras nuevas aspiraciones.
Se detuvo a David, lo cual no es lo mismo que decir “se derroto al pueblo”. Todavía nos tenemos a nosotros mismos, y siempre y cuando actuemos unidos, tenemos algo más que a nosotros, tenemos una razón histórica que imponerle al Estado, a Uribe, A LOS BANCOS, tenemos el derecho del pueblo sobre la burguesía para imponerlo a un grupo de millonarios conspiradores; y no solo tenemos este derecho, SINO QUE PODEMOS Y TENEMOS QUE IMPONERLO.
Es hora de que las águilas se atrevan, de que vuelen, de que rompan las barreras que unos cobardes pertrechados sobre los fusiles del pueblo nos imponen. Estúpidos nosotros si nos acobardamos frente a unos cuantos conspiradores que saben dirigir pero no actuar por cuenta propia, que saben ordenar la cárcel pero nunca hacer ellos mismo lo que le encomiendan a otros (los policías). Cobardes nosotros si no imponemos los derechos de la historia a los privilegios de Sarmiento Ángulo y su banda de ladrones mal llamada Estado. Ya no podemos esperar más del sistema financiero, solo podemos una única cosa: DERRIBARLO. Tal vez otra: celebrar la defunción merecida de esa caterva de ladrones y asesinos.
Uribe combinó todas las formas de lucha para frenar a DMG: medios de comunicación, medios jurídicos y policiales. Nosotros somos más modestos: solo combinamos la movilización popular, masiva y pacífica, para detener este orden de cosas. Los derechos de la razón y de la historia nos respaldan, solo es cuestión de imponerlos, pues la verdad no solo se expone, TAMBIÉN SE IMPONE.
Es preciso volver a la consigna de Danton: Audacia, aduacia, audacia.

ENTERREMOS DE UNA VEZ POR TODAS EL SISTEMA FINANCIERO.
ABAJO URIBE, EL GRUPO AVAL Y TODA LA BANDA DE CONSPIRADORES Y REPRESORES ESTATALES.

No hay comentarios: